lunes, 16 de septiembre de 2013

Leyes objetivas y leyes innecesarias




Leyes objetivas y leyes innecesarias





Las leyes objetivas existen afuera y adentro de nosotros.  “Como es arriba, es abajo.”  ¿Cómo entendemos estas leyes?  Mucho depende de nuestro estado de consciencia.  Si nos damos cuenta de nosotros y del mundo que nos rodea, sin apego a un punto de vista personal, podemos discernir las leyes superiores operando.  La búsqueda de la consciencia es una búsqueda del mundo real. ¿Qué leyes gobiernan el universo y hasta la actividad humana? 


Una gran ley es la Ley de los Siete, que, como Gurdjieff la describiera, gobierna todas las actividades como “octavas” potenciales (un grupo de ocho pasos o notas que aumentan o disminuyen en escala: do-re-mi-fa-so-la-si-do).  La limpieza de un cuarto, por ejemplo: allí el primer “do” podría ser establecer el propósito de hacerlo; la meta final (el siguiente “do”) sería un cuarto ya limpio. La segunda nota, “re,” podría ser identificar las herramientas necesarias que la octava requiere (trapo húmedo, trapo seco, balde, agua caliente, jabón, aspiradora, etc.)  La tercera nota podría ser reunir todas esas herramientas dentro del cuarto, “mi.”  Pero ahora debe comenzar la limpieza y puede que nos sintamos ya tan cansados, que hagamos una pausa antes de llegar a la nota que sigue: “fa.”  Puede que en este punto nos detengamos por completo, desviados por otra octava que reclame nuestra atención.  Si llegamos a “fa,” comenzamos la limpieza y las notas siguientes, “sol,” “la” y “si,” involucran combinar las herramientas y movernos de una parte a otra del cuarto para limpiarlo.  En el “si” sentiremos que el cuarto ya está limpio y puede que nos  detengamos: en este punto necesitamos revisar dos veces que realmente hayamos terminado, antes de guardar el equipo y que consideremos que hemos finalizado.  

Desvío de octavas con cada intervalo



Las octavas rara vez se completan como las imaginamos y planeamos. Después de que comenzamos, el esfuerzo se abandona en uno u otro punto.  Las octavas rara vez continúan en su dirección original.  En otras palabras, las octavas flaquean.  Los desvíos se deben a intervalos predecibles de dos clases: primero, cuando se pierde o se cuestiona el propósito (intervalo “mi-fa,”) y, segundo, cuando la actividad parece completa pero no lo está (intervalo “si-do.”)


Las octavas –y los intervalos en los que estas flaquean– pueden verse en muchas escalas.  Los gobiernos y las civilizaciones ascienden y caen, tal como las vidas y las esperanzas humanas.  Si somos ingenuos sobre la tendencia de las octavas a desviarse y caer, estaremos molestos sobre el abandono de los principios iniciadores de una nación, o seremos frustrados por nuestra propia incapacidad de “hacer,” aún cuando nos hayamos puesto una meta intencional en nuestra vida personal o profesional.  Dormidos, en el típico estado de consciencia dormida, obedecemos a desvíos accidentales y caminos de menor resistencia, sin que importe el propósito que se estableciera.  Dentro de nosotros, vemos que un ‘yo’ desea despertar, pero que el siguiente impulso no sabe nada de eso; el propósito es amenazado. Cómo observar los intervalos y atraer los choques necesarios para sostener una meta es un estudio clave para un estudiante del cuarto camino.


La Ley de los Tres es otra ley cósmica que gobierna hasta nuestra esfera humana, y que muestra que se necesitan tres fuerzas para completar las acciones.   Esta tríada de fuerzas no siempre se forma: con frecuencia tenemos un fuerza activa (tal como el deseo de cambiar algo) y se enfrenta con una fuerza pasiva (que no quiere el cambio), pero falta suficiente tercera fuerza para lograr el cambio.  Las fuerzas activa y pasiva pueden bloquearse entre sí en un callejón sin salida. Con frecuencia somos ciegos a la tercera fuerza que podría llevarnos a salir del bloqueo.
 

El estudio de las leyes bajo las que estamos es un requisito previo a liberarse.  Cooperar con las leyes objetivas con más consciencia y evitar las leyes subjetivas es la esencia de esta libertad.  ¿Cuáles son los ejemplos de leyes subjetivas que podemos discernir, junto a las grandes leyes cósmicas, que nos ayuden a navegar por nuestras vidas interiores y exteriores?  ..

Nuestra programación social sienta las reglas y reacciones que seguiremos sin darnos cuenta de ellas, desde la temprana niñez.  Aprendemos a darnos permiso para sentir emociones negativas bajo ciertas condiciones, tal como las de experimentar mal tiempo, tránsito pesado o servicios pobres, o bien si otro está negativo hacia nosotros.  Considerar internamente, la imaginación, la identificación con algo del pasado, del presente o del futuro, son todos ejemplos de leyes con las que  podemos luchar para aprender a liberarnos de ellas.  A diferencia de las grandes leyes de los siete y de los tres, las leyes subjetivas que gobiernan la formación de la personalidad humana no rigen cuando estamos más livianos, más libres, en un  estado de esencia o de presencia.  Estas jaulas son de material más grosero y, si nuestra energía es refinada y libre, no nos aferrarán con mucha fuerza.
 
Comprender estas leyes puede disolver el miedo y la duda y liberarnos de expectativas irreales.  La percepción directa nos enfoca fuera de nosotros mismos y nos ubica en el Mundo Real, donde “Yo soy.”

Rowena L.





---x---


REUNIONES INFORMATIVAS GRATUITAS TODOS LOS MARTES
o llamar al (011) 4821-4808 desde la Argentina o al +5411-4821-4808 desde el exterior.







 












































lunes, 2 de septiembre de 2013

Recuerdo de sí, boletín de septiembre de 2013


Septiembre de 2013

















La alquimia y las impresiones en el momento 


Al apreciar el momento presente, el reconocimiento de la belleza nos abre aún más. Somos elevados por momentos de rara belleza cuando estos penetran nuestro día con rastros de energías superiores, de mundos superiores. Otros momentos contienen más basura y nos penetran con mucha menos facilidad en nuestro estado típico.


“El proceso de alquimia interna abre la puerta mística de la inmortalidad espiritual.”  Lao Tsé 

Los alquimistas medievales buscaban volver en oro los metales comunes y el  trabajo en el Cuarto Camino incluye diversas transformaciones. Volvemos la observación en comprensión y la energía de las emociones negativas y del sufrimiento real, en un  estado capaz de ver las leyes que gobiernan nuestro mundo. 


“Esta es una rara alquimia con la cual la mayoría de la gente no está familiarizada.” Shah Waliullah de Delhi
 

A cada momento, en este momento, las impresiones se agolpan. Sean visuales, emocionales, intelectuales o viscerales, podemos consumir impresiones intencionalmente al llevar a ellas la atención dividida, partiendo nuestra consciencia entre quien ve y aquello que ve. Al hacerlo, nuestra personalidad superficial se desploma y le sigue una visión más clara.


“En mi esencia, me reúno con quien ve.”  Jeanne de Salzmann

Las impresiones son alimento. Llevar consciencia a las impresiones que llegan digiere más la impresión, tanto como cocinar la comida que no puede comerse cruda. Así, la impresiones difíciles se pueden usar en nuestro trabajo y, a veces, demuestran ser las más sabrosas. Pero disfrutamos la comida más refinada tal como viene, como una fruta madura del árbol.

Podemos crear belleza en nuestro entorno con actos simples de refinamiento: una flor en el escritorio mientas trabajamos, un cuenco con manzanas sobre la mesa de la cocina, ordenada con consciencia, una palabra amable a un amigo o una mirada armoniosa. Nuestras elecciones en el momento nos traen belleza. Esfuerzos así reflejan la sed de perfección que nos llega con nuestros estados de consciencia más elevados: nuestro apetito de mundos más refinados. Y podemos endulzar el momento para quienes están cerca de nosotros.  


“Encuentra la alquimia del amor y transfórmate en oro.”  Hafiz

Así la recepción de la belleza destila nuestra consciencia y los actos simples que crean la belleza nos ligan a un orden de vida más elevado. 
 
“La perfección está en todas partes si solo elegimos reconocerla.”
 Libro del té, por Kakuzo Okakura



Rowena L.





---x---


REUNIONES INFORMATIVAS GRATUITAS TODOS LOS MARTES
o llamar al (011) 4821-4808 desde la Argentina o al +5411-4821-4808 desde el exterior.