martes, 1 de abril de 2014

Recuerdo de sí, boletín de abril de 2014



Abril de 2014















El hilo dorado



Ouspensky llamó al Sistema “fragmentos de una enseñanza desconocida,” y entendía que los libros, las reuniones y las presentaciones eran un preparativo para una escuela, una escuela del Cuarto Camino que trascendería las palabras del sistema en presencia sin palabras. Gurdjieff y Ouspensky hilaron una hebra dorada, Rodney Collin la tejió en su tiempo, y su visión permitió que una escuela convirtiera la teoría en práctica, desarrollando métodos prácticos para producir estados místicos.




Ven, regresa, regresa a la raíz de tu Ser.
Rumi
 
 
En tanto,  mientras que se han escrito volúmenes sobre el sistema, poco se ha registrado de las técnicas para despertar, para estar presente. Esto es porque la consciencia no se puede medir como material, según los sentidos físicos. Ni se puede enseñar el esfuerzo por estar presente de manera general, como si fuese un tema par una clase. Ni bien uno lee o escucha sobre estar presente y lo intenta, aprende todo lo necesario en un momento. Una escuela reúne gente que ya ha experimentado la presencia y que quiere experimentar el estado con más frecuencia. Y una escuela no trata sobre técnicas. Cuando se está despierto, aún por un solo segundo, el esfuerzo para penetrar el momento se desvanece y el que se sumerge se lanza para encontrar que el océano es infinitamente profundo.


Al dividir la atención, el estudiante aprende a darse cuenta de sí mismo hablando con otro, de sí mismo ubicado en cierta escena, de sí mismo actuando, sintiendo o pensando con relación al mundo exterior.
Rodney Collin, Teoría de la influencia celestial


Mientras que una escuela reafirma la necesidad y la oportunidad de la consciencia, el trabajo práctico es la tarea personal de cada estudiante y comienza con estar presente, en el momento. Y a medida que uno desarrolla el sabor de la presencia, se evoca al Tercer Ojo y uno comienza a dar lugar al Trabajo, sugiriendo maneras de introducir la consciencia en la vida cotidiana. Uno comienza a darse cuenta del hilo dorado.


¿Es un sueño? No, pero cuando falta es un sueño,
y cuando falla, la sabiduría de la vida y la riqueza son sueño
y todo el mundo es un sueño.
Walt Whitman, Canto de lo universal





Julian B.
Being Present





 







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